Es imposible no sentir una punzada de nostalgia recordando los dichos de la abuela.Esos refranes, transmitidos de generación en generación, contenían enseñanzas más valiosas que las que se pueden encontrar en cualquier libro de autoayuda. No viene mal recordarlos, por eso en Portal Frases hemos hecho una recopilación de nuestros favoritos.
Refranes de la abuela
¿Desde cuándo los patos le tiran a las escopetas?
A buen entendedor pocas palabras.
A caballo regalado no le mires el diente.
A comer y a misa una sola vez se avisa.
A falta de pan, buenas son tortas.
A la vejez viruelas.
A llorar al río.
A mal tiempo buena cara.
A ningún amante viejo des posada en tu casa, porque amor que ha sido brasa es fácil de prender.
A otro perro con ese hueso.
A pájaro muerto la jaula abierta.
A palabras necias oidos sordos.
A pan duro diente agudo
A perro flaco todo son pulgas.
A quien Dios se lo dio San Pedro se lo bendiga.
A río revuelto ganancia de pescadores.
A Dios rogando y con el mazo dando.
Agua pasada no mueve molino.
Agua que no has de beber… déjala correr.
Ahogarse en un vaso de agua.
Al mal tiempo buena cara.
Al olor del pescado todos los pájaros vuelan y el que no puede volar con el olor se consuela.
Al que madruga Dios le ayuda.
Ande yo caliente y ríase la gente.
Árbol que crece torcido, jamás su tronco endereza.
Barriga llena corazón contento.
Basta que se gasta.
Borrón y cuenta nueva.
Burro grande aunque no ande.
Buscar tres pies al gato.
Cada gallo canta en su corral.
Cada loco con su tema.
Cada oveja con su pareja.
Cada quien sabe como mata sus pulgas.
Camaron que se duerme se lo lleva la corriente.
Comida acabada amistad deshecha.
Como dijo Periquito yo me quito.
Contigo pan y cebolla.
Crea fama y échate a dormir.
Cree el ladrón que todos son de su condición.
Cría cuervos y te sacarán los ojos.
Cuando Dios quiere con todos los aires llueve.
Cuando el gato sale los ratones se pasean.
Cuando el río suena agua lleva.
Cuando las barbas de tu vecino veas cortar, pon las tuyas a remojar.
Cuando marzo mayea, mayo marcea .
Cuando tú vas para arriba yo ya voy para abajo.
Dame pan y llámame tonto.
Dar gato por liebre.
Das la mano y te cogen el brazo.
De dos que se quieren con uno que coma basta
De la bodega el añejo, del abogado el consejo.
De limpios y tragones están llenos los panteones.
De perdidos al río.
De tal palo tal astilla.
Defender con uñas y dientes.
Del árbol caído todos hacen leña.
Del dicho al hecho hay mucho trecho.
Despacio se anda lejos.
Después de la tormenta viene la calma.
Detrás de una vieja capa se encuentra un buen torero.
Dicen que las paredes tienen oídos y los zapatos lengua.
Dime con quién te juntas y te diré quién eres.
Dime de qué presumes y te diré de qué careces.
Dios aprieta pero no ahorca.
Dios le da pan a quien no tiene dientes.
Dios los cría y ellos se juntan.
Dios nos pille confesados.
Donde cae, muere.
Donde fueres haz lo que vieres
Donde menos se piensa salta la liebre
Ea, no querías caldo, pues toma dos tazas.
El buey solo bien se lame.
El gato maullador no es buen cazador
El muerto al hoyo y el vivo al bollo.
El muerto se hace pesado cuando hay quien lo cargue.
El ojo del amo engorda el caballo.
El que avisa no es traidor.
El que espera , desespera.
El que no corre vuela.
El que no está a la muerte de su padre se queda sin herencia.
El que tiene padrinos se bautiza y el que no se queda moro.
El que va por lana sale trasquilado.
El rico vive del pobre y el pobre de su trabajo.
En arca abierta el justo peca.
En boca cerrada no entran moscas.
En casa de herrero cuchillo de palo.
En dinero y santidad, la mitad de la mitad.
En la boca del mentiroso lo cierto se hace dudoso
En menos de lo que canta un gallo.
En tiempo de guerra cualquier agujero es trinchera.
En tierra de ciegos el tuerto es el rey.
En un abrir y cerrar de ojos.
Enfermo que come no muere
Es un hueso duro de roer.
Escupir al cielo.
Ese tiene más cuento que Calleja.
Estar como león enjaulado.
Estar con el alma en vilo.
Estar más loco que una cabra.
Gallo que no canta algo tiene en la garganta.
Gallo que no canta tiene algo en la garganta.
Guerra avisada no mata gente.
Hablando del rey de Roma por la puerta asoma.
Hay que sembrar para cosechar.
Hay que temerle más a los vivos que a los muertos.
Haz el bien y no mires a quién.
La avaricia rompe el saco.
La cabra siempre tira al monte.
La curiosidad mató al gato.
La escasez trae la abundancia.
La mancha de una mora con otra verde se quita.
La ocasión la pintan calva.
La suerte de la fea la guapa la desea.
Las cosas claras y el chocolate espeso.
Las mentiras tienen las patas muy cortas.
Lavarse las manos como Poncio Pilatos.
Líbreme Dios de las aguas mansas que de las bravas me libro yo.
Llevar la procesión por dentro.
Lo cortés no quita lo valiente.
Lo que no es para ti, aunque te pongas; y lo que es para ti, aunque te quites.
Lo que no se come el moro mejor se lo come el cristiano.
Lo que rápido empieza, rápido acaba.
Los locos y los niños dicen la verdad, a los primeros los encierran y a los segundos los educan.
Mal acaba lo que mal empieza.
Mañana será otro día.
Mañanitas de niebla, tardes de paseo.
Más sabe el diablo por viejo que por diablo.
Más vale estar solo que mal acompañado
Más vale pájaro en mano que ciento volando.
Más vale perder un minuto en la vida que la vida en un minuto.
Más vale prevenir que curar.
Más vale ser cabeza de ratón que cola de león.
Más vale tarde que nunca.
Matar dos pájaros de un tiro.
Matar la gallina de los huevos de oro.
Menos lobos, caperucita.
Meterse en camisa de once varas.
Mi pecho es un sepulcro, pero mi boca es una campana.
Nadie mira la paja en su ojo sino en el ajeno.
Ni chicha ni limonada.
No estires más el brazo que la manga.
No hagas al otro, lo que no te gusta que te hagan a ti.
No hay mal que dure cien años ni cuerpo que lo resista.
No hay mal que por bien no venga.
No hay moros en la costa.
No hay mujer fea ni honrada siendo bien enamorada.
No hay que dejar lo seguro por lo dudoso.
No hay que dormirse en los laureles.
No hay que dormirse sin su dueño que el amor vence al sueño.
No hay que llorar por la leche derramada.
No hay que morir para que otro viva
No por mucho madrugar amanece más temprano.
No todo lo que brilla es oro.
No toques que se gasta.
Nunca te acostarás sin saber una cosa más.
Ofrecer hasta meter y una vez metido se olvida lo prometido.
Ojos que no ven corazón que no siente.
Pagar los platos rotos.
Para mentir y comer pescado hay que tener mucho cuidado.
París bien vale una misa.
Pasito a pasito, hasta llegar lejitos.
Pedir peras al olmo.
Pedir prestado dinero, se pierde al amigo y al dinero.
Perro que ladra no muerde.
Pies para que os quiero.
Poner pies en polvorosa.
Poner un granito de arena.
Ponerse en los zapatos del otro.
Por fuera flores, por debajo temblores.
Por si las moscas.
Primero son mis dientes que mis parientes.
Querer es poder.
Quien a buen árbol se arrima, buena sombra le cobija.
Quien calla otorga.
Quien con lo ajeno se viste en la calle lo desvisten.
Quien mal anda mal acaba.
Quien mucho abarca poco aprieta.
Quien mucho abarca, poco aprieta.
Quien no llora no mama.
Quien por gusto corre, nunca se cansa.
Quién se pica, ajos come.
Quien tiene tienda que la atienda
Sacar los pies del plato.
Salir más rápido que volando.
Sarna con gusto no pica.
Se coge antes a un mentiroso que a un cojo.
Ser de armas tomar.
Ser más bueno que el pan.
Ser más feo que un susto.
Ser más viejo que Matusalén.
Si así eres de verde cómo serás de maduro
Si la envidia fuera tiña todos seríamos tiñosos.
Si quieres del mundo gozar, ver, oir y callar.
Si siembras vientos cosecharás tempestades.
Tener memoria de elefante.
Tener memoria de pajarito.
Tener vista de lince.
Terco como una mula.
Tiene la suerte del enano que se fue a cagar y se cagó en la mano.
Tiran más dos tetas que dos carretas.
Tirar la casa por la ventana.
Todo es según el color del cristal con que se mire.
Todo trigo es limosna.
Trabajar menos que el sastre de Tarzán.
Trabajar menos que un espía sordo.
Tuyo o ajeno procura que no te falte.
Un clavo saca a otro clavo.
Un consejo hasta de un conejo.
Una mano ayuda a la otra y las dos juntas lavan la cara.
Viejo es el mar y todavía se mueve.
Vísteme despacio, que tengo prisa.
Voz del pueblo voz del cielo.
Vuelta la burra al trigo.
Zapatero a tus zapatos.
Dichos graciosos de mi abuela (en vídeo)
No hemos terminado todavía. En honor a las abuelas, también vamos a darte la propina (en forma de vídeo con más refranes de abuela). ¡Que los disfrutes!
Bueno, después de esta regresión a la infancia solo nos queda despedirnos, aconsejarte que hagas caso a tu abuela (ella es muy sabia) y pedirte que si te ha gustado el post nos ayudes a seguir creciendo; compártelo a través de tus redes sociales.